Para perdonar a su padre tuvo que invocar a todos los fantasmas de su familia.
Las leyendas de la zona cuentan que las casas y la central térmica de un pequeño pueblo de Aragón se construyeron sobre un campo de batalla de la Guerra Civil Española, sobre los cadáveres sin exhumar y que los fantasmas y los espíritus siguen deambulando por sus calles y edificios, medio abandonados en la actualidad. Mar llega al pueblo para pasar el verano más extraño de su vida después del divorcio de sus padres. La niña se refugia en esas misteriosas leyendas de posguerra que flotan en el pueblo a través del grupo de adolescentes que viven con unas reglas distintas a las que ella conoce. Incapaz de distinguir la ficción de la realidad, Mar irá descubriendo un lugar más fascinante de lo que parecía, conciliando los vínculos familiares con la memoria histórica española, desde el punto de vista de una adolescente actual.
Alberto Dexeus y Ànnia Gabarró filman un luminoso e intimista coming of age que se aleja de todo convencionalismo para erigirse en sutil y valiente cine político. Una ópera prima de poética cercana al cine de Víctor Erice de “El espíritu de la colmena”, donde unas niñas también jugaban en espacios deshabitados con los ecos de la Guerra Civil como fantasmagórico trasfondo. “Les perseides” se percibe como relato de esperanzadora deconstrucción, poniendo el foco en la capacidad de la juventud para renovar una sociedad anquilosada que la generación de sus padres no se vio capaz de cambiar.