Un actor alemán llega a Uruguay en busca de la esposa que lo abandonó. Todo lo que tiene para dar con ella es un número de teléfono que pierde al aterrizar en Montevideo. Un ex adicto cuarentón y un guardia de seguridad lo acompañarán en su búsqueda.
Lo que cuenta esta película uruguaya es la historia de un actor alemán (Félix Marchand) que llega desesperado a Montevideo en busca de la mujer que lo dejó. El hombre es un maleducado, su español es patético, y tiene un talento especial para meterse en problemas. Todo lo que lleva consigo es un número telefónico que lo conduce a una línea muerta. Es en este contexto que el joven, sin un peso en el bolsillo, conoce a Pedro (Pedro Dalton, líder de la banda Buenos Muchachos), un ex adicto cuarentón que con gran generosidad le da un techo por las noches y un par de directivas delirantes sobre cómo moverse por la ciudad. También se verá obligado a contarle su historia de amor a la policía y terminará reclutando para la misión a un guardia de seguridad, igualmente abandonado por su mujer, que siente su causa como propia.
Si quiere salir con vida, el protagonista tendrá que enfrentar su pasado y redimirse frente a los feligreses de una iglesia pentecostal, en una aventura permeada de un humor feroz, que incluye una pandilla de cuarentones despechados que salen a patear el hormiguero por los suburbios de Montevideo.