En la cotidianidad de la vida, alrededor de una mesa, Mariana conoce a Carolina. Los días y los meses pasan, las estaciones cambian, mientras somos testigos de una historia de vida y de un vínculo afectivo que se fortalece en el tiempo.
Este documental cuenta una historia de amor: el que siente Carolina hacia su novio y el sueño que tiene de poder vivir como una persona normal a pesar de sus diferencias (padece síndrome de Down). Ella vive con su madre y su tía en una típica casa montevideana donde nació y creció, rodeada por estas mujeres que le supieron transmitir amor, protección y valores. Pero este es otro momento en su vida, porque Carolina está enamorada. Cumple 21 años y tiene un simple sueño: poder caminar a solas con su novio. Necesita comenzar a visualizar su futuro como mujer y recorrer el camino que la llevará de la adolescencia a la adultez, con todo lo que eso signifi ca. Sabe que su independencia será limitada, pero quiere obtenerla tarde o temprano. A través del vínculo íntimo que se establece entre la directora Viñoles y su protagonista, se rompe la barrera imaginaria que separa a los así llamados “normales” de una persona como Carolina, para poder verla de manera natural. El documental sumerge al espectador en un universo que muchos desconocen, y comparte las similitudes, las cosas que tenemos todos en común con una persona “distinta”.